TOP 5 Creepy Casos Monterrey
- rompiendomitosofic
- 20 mar 2018
- 5 Min. de lectura
Dentro de este top 5 se hablarán de los casos de asesinato más sonados de Monterrey los cuales siguen causando cierta polémica en los ciudadanos por las grandes que generan día a día.
1.- Diego Santoy y los hermanos Peña Coss.
Con tan solo 21 años de edad, Diego Santoy Riveroll fue culpado a doble asesinato, asalto a mano armada a casa hogar, secuestro, entre otras cosas más.
El hecho dio tanto de que hablar, puesto que las declaraciones y careos de Diego Santoy y su novia, Erika Peña Coss eran una verdadera farsa por parte de Erika.
Los hermanos Peña Coss fueron brutalmente acuchillados, estrangulados y arrastrados por distintas partes de la casa, Diego asegura haberlo hecho pero sostiene que no lo hizo solo, tuvo un cómplice llamado Erika quien realmente fue la que tuvo la idea de hacer todo.
Luego de cometer el asesinato, Diego secuestró a la ayudante doméstica que trabajaba en la casa, la puso en la cajuela de un automóvil, y se alejó. Tiempo más tarde, dejó en libertad a la mujer y el coche se encontró abandonado. Los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones hicieron una búsqueda intensiva esa noche en la ciudad.
La ciudadanía comenzó un revuelo enorme por internet y comentarios que les hacían llegar por las televisoras, hubo distintos puntos que se hablaban sobre el por qué del homicidio y uno de ellos era el nombre de los niños, los cuales se supone que formaban parte de un ritual de sacrificio, dicho esto por el empleo que poseía la mamá de los pequeños, Teresa Coss en un programa de astrología en Multimedios Televisión.
Diego asegura que Erika fue quien tuvo la idea de todo aunque Peña Coss se comportaba de una manera indiferente en varios careos pero no procedió absolutamente nada más que los 138 años de cárcel que se le impusieron a Santoy Riveroll.
Al paso de los años, en 2014 se supo la noticia de la boda de Erika Peña Coss con un joven de nombre Mike Otto, misma que se llevó a cabo en la ciudad de San Miguel de Allende, Guanajuato, contrayendo matrimonio con lo tradicional del lugar, ya que se acostumbra caminar por las calles acompañados de sanqueros vestidos de novios, semejando un desfile, en donde los invitados acompañan a los contrayentes rumbo a la iglesia.
2.- Caso Castrillón
En el año 2002 ocurre un homicidio brutal, Julio Castrillón Escobar da fin a la vida de Ana Nassar Campos de 13 años de edad.
La niña fue invitada al cuarto del joven. Él tocaba la guitarra y ella se sentó en la computadora a revisar cosas en internet. Julio tomó una mancuerna de 10 kgs, se acercó por detrás de Ana y le asestó dos fuertes golpes en el cráneo. Al desvanecerse la víctima, el joven la arrastró al baño, y le hizo 3 heridas en el cuello al cadáver y le amputó el dedo índice derecho.
Castrillón colocó el cuerpo de la pequeña en una caja de plástico para arrastrarla por toda la casa hasta llegar al jardín y enterrarla.
El homicidio dio tanto de que hablar, Castrillón es hijo de un ex diputado local del PAN y funcionario , aun así los abogados no lograron mostrar su inocencia pero aun así fue a parar al tutelar registrado con problemática mental grave.
Quedó en libertad con supuesto arrepentimiento y reformado en el 2007.
3.-Casa de Aramberri
A diferencia de los primeros dos, este caso fue un poco más antigüo, madre e hijas fueron degolladas el 5 de abril de 1933 para asaltar su casa mientras el padre y esposo cumplía su jornada de trabajo diaria.
El hecho que sacudió a Monterrey completamente fue el que los asaltantes y asesinos eran parte de la familia de los occisos los cuales también fueron ejecutados por las autoridades mediante la Ley Fuga.
Este caso se convirtió en una completa leyenda de Monterrey destacada ya que en el lugar se escuchan lamentos o voces de las víctimas sollozando y gritando por piedad a sus vidas.
La casa está ubicada en el área centro de Monterrey en la calle Arramberri, ventanas y entradas permanecen cerradas ya que en ciertas ocasiones se apreciaban a personas entrar para realizar rituales satánicos a media noche.
4.- Mauricio Moreno.
Caso estremecedor que pone la piel chinita solo de imaginarse lo ocurrido, Jesús Figueroa, albañil de 27 años confesó estrangular y violar al pequeño de 5 años en una zona de matorrales para luego deshacerse del cuerpo en el arroyo Talaverna en San Nicolás.
No era un niño desconocido para Figueroa, el pequeño Mauricio era hijo de Sandra Ovalle, compinche del delincuente con quien se reunía para embriagarse y consumir sustancias ilegales, motivo por el cual Mauricio tuvo la confianza de acompañar a Jesús Figueroa a los matorrales con engaños sin imaginar que sería privado de su vida con una cinta de zapato.
Sin piedad, el homicida luego de haber privado de la vida a Moreno continuó con su rutina como si no hubiera ocurrido nada, acudió a su casa a bañarse pero no se percató que poco tiempo después fue descubierto escondiéndose cerca de la escena del crimen para ver al menor más de cerca, completamente cosa del destino los cuerpos policiacos acudieron por un accidente automovilístico pero se encontraron con el macabro hecho que cometió Jesús Figueroa.
5.- Colegio Americano del Noreste de Monterrey
“Este tipo de cosas no pasan en México” ese y entre otros comentarios fueron los que se escucharon al presenciar la matanza en el Colegio Americano del Noreste de Monterrey en el 2017.
Macabra situación en la que la noticia corrió como fuego con gasolina, inmediatamente los medios comenzaron a hablar de ello aproximadamente 30 minutos luego de los disparos y bastó 2 horas para que el video del tiroteo se difundiera de una manera rápida e impresionante.
Sin piedad el menor de 15 años de edad, Federico Guevara, contaba con revólver calibre 22 en su mochila para alrededor de las 8:00 horas terminar con la vida de su maestra, hiriendo gravemente a su compañero y al final del hecho, suicidarse.
Guevara contaba con experiencia en disparar el arma por práctica de caza con su padre, dueño del revólver.
Se llevó un procedimiento de investigación extenso para lo cual se diagnosticó estado grave de depresión del adolescente, lo más cercano a responder el por qué de lo ocurrido, pues bien, contaba con una calidad de vida excelente sin alguna limitación como en distintos menores de su edad.
El trauma para los compañeros de salón de Federico fue enorme, el caos y la compasión inexplicable, mantas alrededor del colegio, padres corriendo, reporteros al pendiente de cualquier cosa de los cuerpos policiacos y forense, la vida parecía estar terminando para quienes pasaron el suceso de cerca.

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